domingo, 15 de octubre de 2017

Cansancio


Sentado, se desabrochó las botas, las sacudió, se

quitó los calcetines y dejó los dedos al aire.



Un largo rato después, vino a darse cuenta que

llevaba calzado solo un pie. 

Ni quiso regresar a 

buscarla.





Texto y foto, Virgi